Thriller de acción que gira en torno a Cam (Taylor Lautner, Sin salida (Abduction), La saga Crepúsculo: Amanecer - Parte 2), un mensajero que recorre las calles de la moderna New York montado en bicicleta. En un lugar donde el caos reina en cada cruce y el peligro para los vehículos a dos ruedas es constante, él es el mejor y el más rápido en hacer llegar los paquetes. Su frenética vida se ve además amenazada por unas deudas con una de las bandas de crimen organizado de la zona, con la que se ha visto envuelto casi sin quererlo. Pero el destino le prepara una sorpresa cuando accidentalmente una joven atractiva choca contra su bici. Inmediatamente se siente atraído por Nikki, quien le enseñará un mundo sin ruedas: el apasionado parkour, las acrobacias y peripecias de escalar, saltar y trepar por cualquier superficie urbana. critica: Ya lo he dicho en alguna ocasión: me cae bien Taylor Lautner. En lo cinematográfico, claro, en lo otro no lo conozco. El chico iba para estrella de “Crepúsculo” y se preparó un físico espectacular para ello, pero un cambio radical de guion - o el miedo a que eclipsara a los protagonistas - le convirtió en el pagafantas de la saga. Desde entonces ha tenido el buen juicio de no prodigarse en exceso, imagino que tratando de no rebajar su caché en papeles de tercera y de aceptar reírse de sí mismo con buen gusto cuando la ocasión lo ha requerido (aunque un consejo, Taylor: cuidado con las compañías, juntarte con Adam Sandler no te va a traer nada bueno). Tracers “Tracers” es un ejemplo. Un papel puramente físico donde puede saltar, correr, pegar y disparar de manera plenamente justificada. Un personaje sólido dentro de su simpleza, al que no se le pide que ría, que llore, que sienta o que padezca. Sí, en lugar de dar trabajo a la dirección artística para que Lautner haga cosas que está claro que no van a terminar bien para nadie, el esfuerzo lo asumen unos guionistas creando un traje a su medida. Y no queda mal, con un rider harto de pelearse con el tráfico que, tras descubrir el parkour (eso que hacen algunos ni-nis poligoneros de andar brincando de escombrera en escombrera) decide aplicarlo al curro para acortar los tiempos de entrega yendo por los tejados en lugar de por la M30. Bueno, al escribirlo pierde, pero en pantalla la cosa queda vistosa. Un poco exagerado, pero vistoso. Por supuesto la trama no se reduce a llevar hamburguesas y tampones por Madrid (o Chicago o Vancouver, no recuerdo). El chico conoce a una chica del mundillo y se mete en líos con mafiosos y delincuentes, por lo que además de carreras, persecuciones y saltos cabriteros, también hay besos, coitos con ropa, sorpresas argumentales y algo de tensión. Bueno, mejor verlo. La película es ligera, pero interesante. No da sentido a la vida, pero entretiene. Y si, mejora por el hecho de tener a Lautner en el reparto. Si el chico no te cae bien o tienes envidia de sus abdominales y su mirada de acero, coño, pues no la veas.. Tracers
Una mujer que es secuestrada y obligada a competir en combates clandestinos de élite y que tiene que luchar por su libertad. Rompiendo las reglas: Rebelión...Rompiendo las reglas: Rebelión critica: nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia...... Rompiendo las reglas: Rebelión
Una erupción volcánica y un repentino terremoto devastaron a Los Ángeles, y el reportero John Benson lo aprovecha una vez en la vida para cubrir las últimas noticias del epicentro O puede elegir reunir a su familia en medio de un pandemonio y llevarlo a un lugar seguro. critica: Otra película de este genero de desastres naturales raramente escogen nuevamente Los Angeles por su gran historia. Efectos bien elaborados y logrados logran captar la atención mediante su argumento preguntándonos ¿que pasaría si yo tuviera que?, es para pasar un rato un fin de semana. Destruction: Los Angeles
Tom Hanks interpreta a Finch, un ingeniero especializado en robótica y uno de los pocos supervivientes de un cataclismo solar que ha convertido al mundo en un páramo. Pero Finch, que lleva una década viviendo en un búnker subterráneo, ha construido un mundo propio que comparte con su perro, Goodyear, y con un robot, interpretado por Caleb Landry Jones, que creó para que cuide de Goodyear cuando él ya no pueda hacerlo. Cuando el trío se embarca en un peligroso viaje al desolado oeste americano, Finch se esfuerza por mostrar a su creación, que se bautizó como Jeff, y la alegría y la maravilla que representan estar vivo. Su viaje está plagado de retos y de humor, ya que a Finch le resulta tan difícil lograr que Jeff y Goodyear se lleven bien como a él lidiar con los peligros de este nuevo mundo. critica: Pues resulta que me encantan los trabajos de Hanks, me gustan las películas postapocalípticas (distópicas o no...), me encantan los perros, y me encanta sonreir. ¿Que hay cositas mejorables? Pues claro.., pero posiblemente el guionista, o el director, o incluso el perro me lo podrían explicar, pero estas cositas me dieron igual, porque pasé un rato agradable, entre sonrisas, malos ratos, algo de tensión y todo alrededor de una hermosa historia con perrito incluído, que no es de lagrimón como Hachiko, ni de lejos, pero provoca mucha ternura desde el comienzo. Finch Dastacable todo, fotografía, ambientación, música (ya de entrada Hanks tarareando "American Pie" resulta irónico en ese escenario desolado y con el traje anti-radiación). Por curiosidad, al ver que aparecían varios actores (y actrices, y actroces...) en la ficha, pero solo se ve a Tom Hanks, que lleva todo el peso de la cinta, eché un ojo, y supuestamente ha sido editada y/o recortada, ya que se supone que aparecen, por ejemplo, hija y esposa, en flashbacks, eso sí. Lo mismo, si tiene el aplauso del público, en un tiempo sale "Finch: de *director súper-conocido*", jejeje, como la Liga de la Justicia. Quizás sea porque en este 2021, no he visto demasiados productos loables, dignos de aplauso, y con este, he disfrutado como un enano, y me da igual que se piense que es algo infantil (a ver, pasé un mal rato en las escenas dentro de la ciudad y luego durante los minutos en carretera por la noche, quizás seré infantil, no sé...), pero la recomiendo para toda la familia, ya sea en el cine o en el sofá, ya casi con mantita, que se acerca el invierno ! Wolf. Finch
Wade Wilson (Ryan Reynolds), mejor conocido como Deadpool, su nombre de batalla e identidad antiheroica, está de regreso con Deadpool 2 y en esta ocasión su misión será salvar a un chico llamado Russell (Julian Dennison) de las manos de un poderoso rival llamado Cable (Josh Brolin). En aras de dar cumplimiento a su tarea el antihéroe formará un grupo al cual pondrá el nombre de X-Force. Secuela de la exitosa película (recaudó más de 780 millones de dólares en todo el mundo) parodia de los superhéroes mutantes del 2016, también protagonizada por Reynolds. critica: Fui a ver esta película, porque la primera parte me gustó. El tono chulesco del anti-héroe, no estaba muy visto en el cine y me enganchó su desparpajo y su pasotismo. Esta película, para mi, deja mucho que desear. Deadpool sigue siendo pasota pero ya cansa su actitud hacia todo, los chistes aparecen en cada momento y cansa bastante. Las escenas de acción se hacen lentas y a veces, estás deseando que acabe la película porque es un conjunto de gags que no tienen ni pies ni cabeza. Me gustó más la uno con diferencia. En esta se salva, Josh Brolin, que hace muy bien el papel de Cable. Ryan Reynolds me parece que sobreactúa, ya no le veo tan espontáneo como en Deadpool 1. No entiendo la puntuación tan alta. Lo mejor los postcréditos del final. Deadpool 2
Kate Dibiasky, una estudiante de posgrado de Astronomía, y su profesor, el doctor Randall Mindy acaban de descubrir algo tan asombroso como peligroso. Un cometa en órbita se encuentra en el sistema solar y va directo a colisionar en la Tierra. A pesar de todos sus intentos por advertir al gobierno y la población, parece que la humanidad está dispuesta a tomárselo a broma. Con la ayuda del doctor Oglethorpe, Kate y Randall emprenderán una gira mediática que les llevará desde la Casa Blanca hasta el programa matinal más loco de la televisión para tratar de concienciar al mundo que está a punto de morir. critica: 10 de diciembre de 2021 514 de 739 usuarios han encontrado esta crítica útil Cuando uno se mete a revisar los comentarios sobre 'No mires arriba', la nueva película de Adam McKay para Netflix, se entiende mejor cómo el ser humano parece estar llegando a un callejón sin salida de estupidez. La nueva teoría de la iluminación negacionista sostiene que Leonardo DiCaprio, Jennifer Lawrence, Meryl Streep, Timotheé Chalamet y prácticamente todo Hollywood están compinchados con las élites y que 'No mires arriba' es una advertencia sutil auspiciada por masonería que nos informa de que dentro de unos años la pandemia no será, ni de lejos, el más preocupante de nuestros problemas, sino la llegada de un meteorito que acabe con la Tierra. Precisamente lo que hace 'No mires arriba' es burlarse sin piedad de este tipo de estos conventículos conspiranoicos, ridiculizándolos. Hay más actualidad de la que parece en su historia: dos científicos descubren un asteroide que amenaza con destruir nuestro planeta pero son ignorados sistemáticamente por los medios de comunicación y los políticos, además de por una sociedad reaccionaria que responde con escepticismo a la ciencia y niega su validez, tomando por locos o comprados a los dos astrónomos que dan la señal de aviso. ¿Nos suena a algo? Una pista: el movimiento antivacunas, el desfase terraplanista o aquellos sujetos que hablan de que los gases de efecto invernadero reverdecen el planeta. 'No mires arriba' es una carta de amor hacia todos aquellos estúpidos y estúpidas que hacen de este mundo un lugar peor. No mires arriba McKay coloca en el foco un asteroide, pero bien podría ser la crisis del coronavirus o los efectos ya devastadores del cambio climático. El cineasta elabora una sátira inteligente y la dota de un oscuro humor negro, pero en realidad 'No mires arriba' es una cinta aterradora. Porque esa idea que plantean otras películas apocalípticas sobre una Humanidad hermanada contra la destrucción, o unos presidentes de Estados Unidos comprometidos con la salvación de la Tierra, es aquí retratada como lo que probablemente sería en la era post trumpiana: un completo disparate de información falsa, negacionismo, histeria colectiva, fanatismo y sucio electoralismo político. Más allá de su interesante guion y sus personajes bien caracterizados e interpretados, 'No mires arriba' es un estupendo estudio de la idiotez humana en tiempos de crisis, de cómo nuestra especie parece abocada a una catástrofe climática de consecuencias irreversibles mientras que la gente de a pie, suficientemente ahogada ya con problemas más mundanos, prefiere hacer caso omiso de la ciencia o (des)informarse a través de las redes sociales e Internet en vez de afrontar los problemas con entereza y conciencia. Desde luego, es un estupendo retrato de cómo podría ser realmente el fin del mundo en esta era posmoderna. No mires arriba