Cuando el padre de Runa desaparece en un viaje vikingo, ella se convierte en cabeza de su familia, pero vive atormentada de extrañas pesadillas. Un día, cuando está cazando, se encuentra con un guerrero herido que lleva noticias de su padre, algo nuevo que parece estar conectado a sus sueños. Algo les viene, algo vil. critica: Película sueca que mezcla el terror con la época vikinga, dirigida por un director bastante desconocido al que se le achacan títulos como Vilsen (2016) y protagonizada por Moa Enqvist Stefansdotter y Yohanna Idha (de la serie Wallander, 2008). La cazadora: Runa de los muertos 811 AD, una familia, aislada en su hogar, en lo profundo del bosque, a pocos días de viaje desde Birka. Ellos son pobres. La caza y la pesca no han dado mucho fruto durante algún tiempo, y el padre, Joar, decide ir a una incursión vikinga. Tras la larga espera, la familia comienza a temer que no volverá. Esta pelicula parte de una idea bastante interesante, pero se pierde en un metraje muy alargado, de 105 minutos, para lo que se quiere contar, y una historia que arranca y empieza a ser interesante en la última media hora. En este sentido, nos encontramos con la primera hora y cuarto de la película, donde no se manifiesta ni terror ni acción alguna, quedando en una mera introducción de personajes, insistiendo en exceso en este sentido cuando no hacia falta, y en un tramo final que vira hacia el terror y que resulta interesante, aunque esta media hora no consiga rescatar un film en que gran parte del metraje resulta tedioso. The Huntress es una propuesta interesante mal llevada a cabo, con unos 30 minutos finales muy correctos, pero un tramo inicial que es puro tedio y no consigue compensar. Nota personal 5/10 La cazadora: Runa de los muertos
La joven Christine Brown, ambiciosa apoderada de un banco de Los Ángeles, sale con un hombre encantador, el profesor Clay Dalton. El trabajo de Christine consiste en conceder préstamos hipotecarios. Un día la señora Ganush, una misteriosa anciana, va al banco para pedirle una moratoria, pero Christine se la niega y la señora Ganush pierde su casa. La anciana decide entonces vengarse lanzándole una maldición que convierte su vida en un infierno. Ante la incomprensión de su escéptico novio, Christine busca la ayuda de un vidente para salvar su alma de una condenación eterna. Intentando ayudarla a recobrar una vida normal, el vidente la guía en una frenética carrera para conjurar el hechizo. Pero las fuerzas del mal se acercan y Christine debe enfrentarse a algo impensable. critica: "Drag Me To Hell" es un soplo de aire fresco a un trillado ya género de terror actual, de la mano de uno de los astros del fantástico, Sam Raimi. Partiendo un guión escrito con su hermano en los tiempos de "Army Of Darkness", desde el primer fotograma uno parece darse cuenta de que Raimi ya estaba un poco asqueado de tanto Spiderman (y eso que su hasta ahora trilogía es un acierto no sólo como adaptación sino también como enfoque de la misma) y buscaba una vuelta a sus orígenes, a los tiempos en los que se lo pasaba en grande poniendo a su amigo Bruce Campbell en apuros luchando contra demonios de otra dimensión. Arrástrame al infierno Aquí el planteamiento no es muy diferente al de su (fantástica, cachonda, genial, divertida, gamberra) trilogía "Evil Dead". Una empleada de banca, interpretada formidablemente por Alison Lohman, cae en la maldición de una extraña mujer a la que le deniega un aumento de su crédito. A partir de entonces, Raimi se pone manos a la obra y ofrece un auténtico festín de autoparodia, humor macabro y unos juegos de cámara que mucho recuerdan a su cámara kamikaze de sus primeros títulos. Mención especial merece Lorna Raver, que hace que su Mrs. Ganush ya sea todo un icono, realizando una interpretación excelente de una personaje que por méritos propios es el epicentro del film. Excepcional este personaje (puramente Raiminiano) que aterroriza y hace reir a partes iguales. Raimi se auto homenajea constamentemente. Consigue, como ocurrió en su "The Evil Dead II" hacer una película de terror que muy inteligentemente combina terror (cachondo, eso sí) con un soplo de gamberrismo y sentido de la diversión que muy pocos saben plasmar. Y encima, nos deleita contando con muchos de sus colegas de fechorías, como Robert Tapert a la producción, Bob Murawsky al montaje y Peter Deming de director de fotografía (hubiese estado muy bien haber rescatado a Joe Loduca para la música, aunque Christopher Young hace un score fabuloso). También cabe mencionar, que a los fans del director nos congratuló sobremanera ver que su coche "1973 Oldsmobile Delta 88", que muchos sabrán que aparece en todas sus películas (excepto en "The Quick and the Dead" por motivos obvios), hace en "Drag Me To Hell" una aparición más meritoria que en sus últimas películas, ya que es protagonista de una escena clave (escena que tiene un "gag" Raiminiano 100 por 100). Y otro par de curiosidades: nuestro querido Bruce "Ash" Campbell no pudo hacer una pequeña aparición en el film debido a que estaba liado con otro rodaje, y en los créditos finales podemos escuchar una pieza de Lalo Schifrin que fue deshechada para "The Exorcist". En definitiva, Raimi ofrece una muestra de como hacer cine de género diferente, no dejando a un lado su peculiar forma de afrontar las películas de terror y mostrando que aún tiene el talento suficiente con el que encandiló a los fans del fantástico en los años 80. Arrástrame al infierno
Royce es un mercenario que, a regañadientes, encabeza a un grupo de guerreros de élite que acaban dándose cuenta de que los han llevado juntos a otro planeta… para servir de presa. Con la excepción de un médico desprestigiado, todos ellos son unos desalmados asesinos —mercenarios, yakuzas, presidiarios, miembros de escuadrones de la muerte—, “depredadores” humanos que ahora están siendo cazados y eliminados sistemáticamente por una nueva raza de Depredadores extraterrestres. critica: Esta película se puede resumir en una frase: Predators De entre todos los posibles guiones y direcciones posibles que podían existir para dirigir una película basada en la franquicia predators, han elegido el peor guión y la peor dirección posible. La película es infumable. Llena de diálogos absurdos, inventados, sacados del ala, carentes de sentido. Las escenas de acción son peores que las de Alien vs Predator 2. Adrien Brody va de super pro y le queda fatal, soltando comentarios prepotentes, sin fundamento, haciéndose el interesante sin sentido y quedándose con la metodología de los depredadores tocando cuatro piedras. Además es la típica película en que los protagonistas, a pesar de estar armados, eligen siempre la peor opción, haciendo que el espectador se quede atónito. En fin... toda la película en si es ridícula. No le llega ni a la suela del zapato a la primera versión. Y además con final de mierda. Predators Los que hayáis visto AvP2, que sepáis que es del mismo estilo o, porque no, LA MISMA MIERDA. Realmente extraño porque "Kontroll" me gustó y bastante. Continuo despotricando en el spoiler. Predators
Después de haber recuperado el reino del Dragón Smaug, la Compañía ha desencadenado, sin querer, una potencia maligna. Un Smaug enfurecido vuela hacia la Ciudad del Lago para acabar con cualquier resto de vida. Obsesionado sobre todo con el reino recuperado, Thorin sacrifica la amistad y el honor para mantenerlo mientras que Bilbo intenta frenéticamente hacerle ver la razón por la que el hobbit toma una decisión desesperada y peligrosa. Pero hay aún mayores peligros por delante. Sin la ayuda aparente del mago Gandalf, su gran enemigo Sauron ha enviado legiones de orcos hacia la Montaña Solitaria en un ataque furtivo. Cuando la oscuridad se cierna sobre ellos, las razas de los Enanos, Elfos y Hombres deben decidir si unirse o ser destruidos. Bilbo se encontrará así en la batalla épica de los Cinco Ejércitos, donde el futuro de la Tierra Media está en juego. critica: Abriré la crítica dejando claro un punto: soy un total y absoluto fanboy de ESDLA. Soy un friki. Me encantan los libros, todos. Me los he leído dos veces cada uno (incluido El Hobbit). Me encanta la saga original. Tengo puntuada con un 10 la trilogía entera aquí, en esta misma página. El Señor de los Anillos es, para mí, la mejor película de la historia del cine fantástico y de aventuras (al fin y al cabo, no deja de ser una macro-película de 9 horas). Forma parte, no sólo de mi acervo cultural cinematográfico, sino también de mi vida, de mis recuerdos y vivencias. No es una película más para mí. Las vi cuando tenía no más de 12 años, y desde entonces (como pasara con otras sagas, como Star Wars), han formado parte de mí. Jugué a todos sus videojuegos, debatí sobre ellas durante horas y días y semanas con mis amigos, fantaseé con ellas. Las he visto incontables veces y, cuanto más lo hago, más me apasionan. Dicho esto: El hobbit: La batalla de los cinco ejércitos La primera parte de El Hobbit me gustó. Mucho, de hecho. Los personajes principales tenían gracia y carisma, y había química entre ellos (sobre todo entre Bilbo y Gandalf). Me gustó el planteamiento, como giraba toda la trama entorno al concepto de "vivir una aventura". Había épica (considero que el momento en que los enanos cantan la canción de "Misty Mountain Cold" antes de partir hacia Erebor, es probablemente de lo mejor de toda la saga, junto con la escena de Bilbo y Smaug de la segunda). La peli, sin llegar a ser nada del otro mundo, estaba realmente bien hecha. Se había cambiado el tono por completo. Mientras que la trilogía original era más "seria", más adulta, más pretenciosa incluso, ésta se plantea como una peliculilla de aventuras, más relajada, buscando más el entretenimiento puro y duro que el dejar huella. Una vez acepté el cambio de tono con respecto a la original, la disfruté muchísimo. No me gustó el aumento del uso de CGI con respecto a la trilogía original (ej. la escena de los trasgos o la de los trolls), pero era perdonable. La segunda supuso un bajón enorme. Se puso en evidencia el que iba a terminar siendo el mayor fallo de esta segunda trilogía: la falta de historia. El Señor de los Anillos es un libro de unas 1.500 páginas, mientras que El Hobbit apenas tendrá 200. Para paliar esto, y dado que parece impensable que el señor Jackson ruede una película de menos de dos horas y media, se inventan personajes, localizaciones y situaciones que fallan estrepitosamente. El romance de la elfa con el enano es absolutamente absurdo, no encaja, no transmite nada, es horrible. Todo el tramo de la Ciudad del Lago es infumable, tedioso, no aporta nada a la historia y además aburre. Se empiezan a notar fallos de coherencia y de guión, que terminarían de explotar en la tercera. Ante la falta de historia, tiran de CGI, que lo inunda todo. Escenas como la de los barriles son buena prueba de ello. La única buena escena de toda la película (la conversación de Bilbo con Smaug, buenísima) se pierde en un mar de tedio y aburrimiento. Smaug, que podría ser, con permiso de Bilbo, el personaje más interesante de toda la trilogía, apenas tiene minutos. Y así, llegamos finalmente a la tercera parte... El hobbit: La batalla de los cinco ejércitos
El matrimonio Green, Cindy (Jennifer Garner) y Jim (Joel Edgerton) son incapaces de tener un hijo por los medios naturales. Una noche deciden escribir en una libreta todas las aptitudes y actitudes que les gustaría que su hijo tuviese, colocan las hojas en una pequeña caja y la entierran en el jardín. Esa misma noche, bajo una gran tormenta sucederá un milagro: aparecerá un muchacho en sus vidas (nacido de la tierra), que llama a su puerta, que dice ser su hijo. Este niño tan especial les hará ver la vida desde una nueva perspectiva que antes no tenían, y verán cumplido por fin su sueño de ser padres. El niño, que recibe el nombre de Timothy, tendrá un gran talento musical, así como destreza deportiva y una gran espiritualidad. critica: La Extraña Vida de Timothy Green (The Odd Life of Timothy Green) es una preciosa fábula sobre la paternidad, la infancia, el paso del tiempo y la belleza de ser diferente. La extraña vida de Timothy Green La película cuenta la historia de Cindy y Jim Green, trabajadores de una fábrica de lapices, que tras varios intentos no pueden ser padre biológicos. Pero tener un hijo es lo que más quieren y por eso escriben como se imaginan a su hijo perfecto, lo guardan en una caja y lo entierran en el jardín. Una noche su sueño se hace realidad y aparece Timothy, justo el niño que deseaban... La historia la narran los propios protagonistas a través de las experiencias de la paternidad. Y es que en definitiva ese es el mensaje principal de la película: las expectativas que unos padres depositan en un hijo y las desilusiones de cuando dichas expectativas no son superadas del modo deseado. La forma en que esperan que su hijo encaje con los demás niños a pesar de que sea diferente, y ese es otro punto fuerte de la historia, la moraleja de aceptar lo diferente y lo raro como un don no como un defecto. El paso del tiempo está mostrado a través de las hojas (siempre presentes en la película) de las piernas de Timothy, que nos recuerda que ningún sueño es para siempre. En el plano técnico el film cumple correctamente, Jennifer Garner y Joel Edgerton están bien interpretando a los ilusionados padres, Ron Livingston y Dianne Wiest más que correctos en los papeles antagónicos pero los que destacan son los jóvenes CJ Adams, como el adorable protagonista, y Odeya Rush como, según describe Timothy, la chica más maravillosa del mundo. El ambiente está bastante logrado con paisajes otoñales en la mayor parte del metraje. Esta película no ganara decenas de premios, ni recaudara millones en taquilla, probablemente no será recordada por mucho tiempo pero uno no puede reprimir una sonrisa tras haberla visto. Y si, peca de sentimentalismo pero de vez en cuando un poco de azúcar no viene mal, y más si es con historias como "La Extraña Vida de Timothy Green". La extraña vida de Timothy Green
El huracán Katrina ha llegado a Nueva Orleans y ha acabado con todos los bienes que poseían la mayoría de sus ciudadanos. Entre los afectados, se encuentra un joven de raza negra cuya educación y formación no parece suficiente como para poder reponer todas las pérdidas. Desesperado, decide juntarse con sus tres amigos, hacerse gángsters y conseguir el dinero necesario para mantener a sus familias a salvo. Esta osadía no será pasada por alto por el Departamento de Policía de la ciudad, que tratará de detenerles lo antes posible. critica: "- Estamos empapados en gasolina y tú matas por cerillas". Ciudad de asesinos Ambiciosa película dirigida con nervio, fuerza dramática en muchas ocasiones pero también de forma un tanto farragosa e inconexa. Es interesante su historia, que une los géneros de acción, thriller, policíaco, drama, social y político. Todo mezclado, a veces con claridad expositiva, otras un tanto caótica. Es irregular en su desarrollo pero nunca aburre pese a su larga duración y está plagado de buenos personajes, como el de Ethan Hawke, que cada vez que sale en pantalla nos ilustra con unos ingeniosos diálogos o monólogos, como el que tiene lugar en el cementario, "hablando" con su esposa muerta frente a su lápida y que, entre otras cosas le comenta: "- Aquí (en Nueva Orleans) los mosquitos son tan grandes que se pueden poner a dos patas y follarse a un pato". Su parte final, además, pudiera provocar la perplejidad en el espectador, dada su ambigüedad. Con todo, a pesar de que podría resultar fallida en su totalidad, tiene numerosos aspectos positivos, tanto técnicos como argumentales, como para no ser desdeñable. Creo que los aspectos positivos (interpetaciones, fotografía, dirección artística, montaje) priman sobre los negativos y al final deja un aceptable sabor de boca. https://filmsencajatonta.blogspot.com/ Ciudad de asesinos