Basado en True Events: Sufriendo de parálisis del sueño, una estudiante de medicina cae presa de una fuerza demoníaca que quiere destrozarla desde adentro. Dividida entre la cordura y lo desconocido, no le queda más alternativa que ponerse en contacto con un sacerdote local para pedir ayuda. critica: No voy a decir que sea una película de 10/10, pero ciertamente tampoco es una 1/10, está en algún lugar intermedio, si estás buscando grandes sustos o efectos de Hollywood, probablemente te decepcionará, definitivamente lo es. una quemadura lenta debido al desarrollo temprano del personaje, pero si puedes llegar a la parte de 40 o 50 minutos de la película, el director comienza a aumentar los escalofríos y el suspenso. El ultimo rito Disfruté mucho esta película independiente, fue un gran equilibrio de ritmo progresivo, por lo que conocemos un poco a los personajes antes de que se vuelva completamente de terror. Me gustó cómo exploró la relación entre la realidad y lo paranormal, algo que no había visto antes. El ultimo rito
Precuela de la saga Star Wars, en la que se conocerán los primeros pasos que dio el personaje de Han Solo, desde joven hasta convertirse en el antihéroe que vimos en "Una nueva esperanza", antes de que se encontrase con Luke y Obi-Wan en la cantina de Mos Eisley. critica: Es inexplicable que le hayan dado todos los palos que le han dado a esta película, creo que no están para nada justificados. Es una película muy entretenida que, pese a la ausencia de Jedis y de todo lo que eso conlleva (sabíamos de ante mano que no iban a estar en la película y de haber aparecido la hubieran criticado por intentar meterlos con calzador), no desentona. Han Solo: Una historia de Star Wars La película es dinámica, las batallas son entretenidas y tienen sentido, no tiene fallos gordos de guión y te sorprende gratamente en muchas ocasiones, además yo personalmente tenía dudas del carisma del protagonista y la verdad es que me ha sorprendido gratamente, por no hablar de todos los personajes secundarios que en líneas generales son muy buenos. En definitiva, no hagan caso de las críticas de los autodenominados expertos y críticos de cine, disfruten de esta película porque es una digna expansión del universo Star Wars y una película muy entretenida. Han Solo: Una historia de Star Wars
Los miembros de una banda de música punk, tras ser los únicos testigos de un asesinato en un bar, son encerrados en una habitación del local por los autores del homicidio: una pandilla aterradora de skinheads, neonazis de supremacía blanca, liderados por el dueño del bar (Patrick Stewart), un tipo que no quiere dejar testigos de lo sucedido. critica: Con los machaques constantes de remakes de terror, mis ganas de ver un film de dichas características disminuyen considerablemente año tras año. Un film puro de asesinos y víctimas necesita de una genial factura e imprevisibilidad. Harto de los slashers donde el asesino lleva una máscara andrajosa y todo se ve venir a quilómetros. O de los films de hechos sobrenaturales, posesiones y exorcismos, que pecan de topicazos y que la mayoría de ellos parecen absurdos. Si se pretende provocar miedo con el cine actual, o se realizan films que toquen temáticas más psicológicas o todo se va al traste sino hay una buena dirección y un montaje adecuado. Green Room Green Room no es previsible ni imprevisible, no da tiempo ni a pensarlo. Es seca. Tajante. Si alguien abandona a su bando para irse con el contrario, no sabes si lo hace por emboscada o por traición. Balazo en la sien y adiós. Los skins no atienden a ningún tipo de racionalidad, atacan porque les encanta la violencia, así que la dirección busca el realismo y la crueldad de manera contundente. Posee un ritmo trepidante perfectamente estructurado que no permite desviar la mirada de la pantalla ni un segundo. El gore no falta a la cita y algunas escenas dan un poco de asco, pero tienen sentido dentro de lo que pretende ofrecer la película: ingenua banda de Punk-Rock vs. Skin-heads neonazis. Lógicamente habrá sangre. La inclusión de perros asesinos también aporta una tensión extra. En realidad, es como si los buenos lucharan contra dos equipos: los neonazis y los animales salvajes. Importante el espacio donde suceden los hechos: un antro claustrofóbico con paredes deterioradas y muebles oxidados, con unas habitaciones pequeñas que sirven para amedrentar a cualquier visitante del recinto y a los espectadores del film. La puesta en escena cobra una importancia vital para que nos sintamos más intimidados por aquello que observamos. Las interpretaciones son muy buenas, teniendo en cuenta que se trata de un thriller/horror: Patrick Stewart lo borda como caudillo de los skinheads e Imogen Poots brilla en cada una de sus intervenciones. Mis opiniones del cine de terror actual no darán un giro drástico después de Green Room; sigo pensando que continúan fabricándose una inmensa cantidad de películas de terror, de las cuales muchas son bodrios. Tampoco es que sea un género flexible con mucho que explotar, con la de cosas que se han hecho ya todo parece repetitivo. Volver al éxito de antaño es complicado, pero sin embargo, es posible que se realicen films de terror que aunque sean previsibles en argumento consigan ser brillantes en el apartado técnico. Espero que resurja y que las siguientes producciones sigan la estela de Green Room o Eden Lake. Green Room
Después de que el robo chapucero de un banco acabe con su hermano pequeño en prisión, Constantine Nikas (Robert Pattinson) se embarca en una odisea a través del mundo subterráneo de la ciudad en un intento, tan desesperado como peligroso, por conseguir el dinero de la fianza para poder sacar a su hermano de la cárcel. critica: Cuando se habla de "pasar un buen rato", no será lo mismo pasarlo con unos pijos del barrio rico que con unos yonkis del callejón más próximo. De igual manera, para cualquiera de los dos grupos, no habrá comparación posible entre sus modos de vida, por mucho que puedan aspirar a las mismas cosas. Un banco desatendido para un tirado sin blanca es una oportunidad, para un ladrón será un objetivo y para cualquier otro ciudadano una minucia sin importancia. Good Time 'Good Time', teniendo esto en cuenta desde el título, no busca tanto narrar una historia como una experiencia: la larga, larguísima noche de Constantine Nikas, oportunista profesional, tratando de reunirse con su hermano Nick mentalmente discapacitado, huyendo de la ley por un atraco que ha salido mal. Por tanto, no es sólo otra noche más, sino una carrera contrarreloj por escapar de una cárcel casi asegurada, con la vena suicida que supone jugársela por la propia sangre, siempre merecedora de todos los reproches del mundo pero imposible de abandonar en medio del caos. Hay cariño entre estos dos hermanos, no hace falta que nos lo cuenten atentamente, porque un simple comentario o preocupación causa más efecto en plena vorágine de fuga. Un sentimiento similar se despliega en toda la odisea: los contactos humanos son breves y utilitarios, las acciones difusas y repentinas, las impresiones punzantes y a menudo procesadas cuando ya hace demasiado que se han vivido. La noche se vuelve un espacio de contornos difusos y horas desesperadas, con luces de neón que cortan la oscuridad como navajas, mientras los habitantes nocturnos salen de sus madrigueras para sufrirla, aprovecharla o simplemente gastarla hasta la nueva luz del alba. Connie recorre ese visceral escenario, demasiado abrumado por sus circunstancias como para reparar demasiado en él, y por el camino visita todos esos lugares que sólo existen en la madrugada: áreas de servicio amparadas en la maldición de las 24 horas, casas en penumbra donde los trastos han hecho imperio y el fulgor de la televisión da invitación a los impulsos de una adolescencia sin padres, hospitales bañados en luz blanquecina que se pueden oler y saborear, y hasta un fosforescente tren de la bruja que lanza la peripecia a la fantasía surrealista, gracias a una música electrónica que fija un ambiente hipnótico e imposible. El carácter episódico se cuela también entre las relaciones que se dan, pues Constantine se encuentra con un ladrón yonki o una ingenua adolescente afroamericana a la carrera, mientras necesita usarlos para sus propósitos tan desesperados como improvisados, y no parecen tener mucho más significado que el más puro azar. Si bien Connie aprenderá a distinguirlos de su histérica madre o el usurero judío que comercia con la libertad de su hermano: alguna que otra despedida se sucede, sin tiempo ni sentimiento, con promesas rotas de por medio que sonaron esperanzadoras en su momento, quizá como un recordatorio de que a veces alejarse es lo único que se puede dar, aunque vaya a ser lo único que quedará. Tal vez porque todas las decisiones, tanto las que se toman como las que nos quitan, construyen nuestro viaje, aunque sea a golpe de cicatrices y un sentimental equipaje. Las intenciones de Constantine eran buenas, el cariño hacia su hermano genuino, sus métodos no los mejores pero nunca crueles... aunque al final todo eso no sirve de nada si los que hablan desde el televisor le juzgan criminal; esas voces que suenan continuamente mientras completaba su propia y emocional épica urbana. Ese entorno es lo único que él conoce, la única ciudad que siempre verá. Sólo queda esperar que haya aprendido a disfrutarla, porque nunca tendrá mucho más. Good Time
Cuando Fay vuelve al trabajo tras su baja de maternidad, ella y su marido deciden contratar a Jen, una joven niñera que se instala en su casa. Pero pronto, Jen comienza a descuidar sus obligaciones y los Tripps deciden despedirla pero Jen se niega a irse. critica: Argumento que era bueno se pasa un tiempo entretenido durante el desarrollo pero si la trama es muy exagerada si la ven se darán cuenta porque. La protagonista malvada en realidad hace un papel aceptable trata de encarnar una locura pero sumamente malvada y crea muchas facetas, por cierto de lo mas flojo es el personaje del esposo muy mal hecho nada creíble. Secretas intenciones
El trabajo del multimillonario CEO de tecnología Donovan Chalmers es tan valioso que contrata mercenarios para protegerlo, y un grupo terrorista secuestra a su hija solo para conseguirlo. critica: Siguiendo con lo último protagonizado para el cine por el incombustible Bruce Willis, nos llega el turno de otra colaboración con el director iraní Matt Eskandari. Si ayer le echaba un vistazo a "Survive the night" ahora le toca el turno a "Hard kill". Mercenarios de élite La película es una muestra sencilla y muy básica de lo que es una típica película de acción con mercenarios de por medio y Willis se echa a la espalda, de nuevo, un papel más secundario, dejando el protagonismo al actor más joven, en este caso un más que atractivo Jesse Metcalfe que está como un queso y que, además, no lo hace nada mal. Decía otro usuario aquí que este actor ha participado en la versión moderna de la mítica serie "Dallas", pues yo quiero verle porque el chaval está muy pero que muy bien. Junto a él, la modelo y reina de los cosméticos, Lala Kent, correcta, y una ex luchadora de la WWE, Natalie Eva Marie, muy al estilo Gina Canaro, con fisonomía parecida, con poca aptitud para la actuación y muy parecida en todo a la también ex luchadora protagonista de "The mandalorian". El malo de turno está aquí correctamente interpretado por le atractivo Sergio Rizutto. También está correcta la actriz Thuy Nguyen. Película, en definitiva, para desconectar durante algo más de hora y media y satisfacer las ganas de cine sin complicaciones. Un saludo, Tess Mercenarios de élite