Jake llega a la Universidad de Texas en su deportivo, con las ventanillas bajadas y la música a todo volumen. Quedan sólo unos días para que arranque el curso, pero piensa aprovecharlos conociendo chicas, yendo a fiestas y haciendo amigos. Secuela espiritual de Dazed and Confused, ambientada en los años 80. Los protagonistas, un grupo de jugadores de béisbol a punto de ingresar en la Universidad, son conscientes de que las obligaciones de la edad adulta son ya ineludibles. critica: Personalmente siempre he admirado algo en particular del cine de Richard Linklater, un tipo nada propenso a lucirse con planos espectaculares y en cuyos guiones parece que todo dios habla demasiado, y es lo sumamente fácil que resulta identificarse con alguno de los personajes, y la tremenda facilidad para desprender humanidad y sencillez por parte de todo el mundo. También es cierto que en todas sus películas hay momentos en los que no puedo evitar abstraerme un poco o divagar de lo que me cuentan en pantalla, pero es algo normal en un cine tan repleto de diálogos, que es difícil interesarse por absolutamente todos. Todos queremos algo En esta película Linklater ha querido alejarse de complejas relaciones amorosas que perduran durante dos décadas o de dotar de inmensa complejidad al protagonista. Un chaval que va a la universidad a jugar al béisbol en un coche sumamente grande, con pantalones sumamente estrechos y el pelo sumamente largo. Para quien haya nacido en Estados Unidos en los años 60 y fuera a la uni en los 80 supongo yo que esta película será nostalgia pura. Para mí que nací un poco más tarde y un poco más lejos, sigue siendo una mirada al pasado muy satisfactoria, sin pretensiones, de manos de un grupo de actores desconocidos y de gran talento. No hay una historia compleja que contar, sólo los días previos al inicio de un curso universitario de una generación de chavales muy afortunados. Todo tiene un ritmo adecuado, un ambiente magnificamente concebido. Es ligero, me hace sonreír, me divierto con esos tíos tan charlatanes y conscientes de que lo mejor que pueden hacer es beber cerveza, liarse con chicas y tomarse mucho el pelo. No nos quieren contar nada más, ese es el asunto. En un Hollywood actual en el que para ser reconocido tienes que pelarte de frío en la tundra suramericana o interpretar a algún transexual pionero, Richard Linklater nos permite respirar un poco de buen rollo, de historias sin alardes ni pretensiones de grandeza. Algo que yo agradezco y disfruto. Un disco de Pink Floyd y un canuto, eso es lo que ha dejado. No hay miedo. Todos queremos algo
Una mujer (Kendrick) se enamora de un hombre (Rockwell) aparentemente perfecto... pero resulta ser un asesino profesional, algo que le planteará no pocas dudas éticas y morales. critica: Mr. Right funciona desde el puro disparate, entretiene mientras la contemplas porque todo es increíble y a la vez muy divertido. Mr. Right El personaje de Anna Kendrick me ha gustado porque recoge muy bien, pautas de comportamiento que hoy día mantienen algunas chicas... Paco Cabezas ha logrado extraer todo el jugo a la historia, apoyado en un Sam Rockwell que funciona como un exprimidor. El punto absurdo del enamorado asesino, rescata ese conjunto demencial funcionando como contrapartida exótica y siempre extravagante. Mr. Right
Brandon se prepara para dar su último show de stand-up. A medida que transcurren sus historias y chistes, el público comienza a animarse. Pero en ese preciso momento, él se dará cuenta de que esas historias tienen una fuerte relación con su pasado. Más de lo que él se imagina… critica: Antología formada por una serie de cortometrajes con nombres conocidos como Albert Pintó (Malasaña 32, 2020) o Vincent Paronnaud (Persépolis, 2007), que están unidos entre sí por un hilo conductor dirigido por Carlos Goitia. Asylum: Twisted Horror & Fantasy Tales Brandon se prepara para presentar su último monólogo. A medida que cuenta sus historias y chistes, el público se anima. Sin embargo, en ese instante el cómico se da cuenta que sus historias tienen mucho que ver con su pasado. Mucho más de lo que él imagina. En ASYLUM encontramos el problema de que muchos de los cortometrajes que componen el largometraje tienen un recorrido muy largo por los festivales, y el espectador que tenga costumbre de ver cortos conocerá fácilmente segmentos como A Father's Day (Mat Johns, 2016), y por otro lado, el hilo conductor carece de gracia por si misma y se limita a poco más que presentar las diferentes partes. Quitando lo anterior, estamos ante una antología muy decente y diversa, con segmentos de una calidad excelente como The Cleansing Hour (Damien LeVeck) o RIP (Albert Pintó y Caye Casas), que empieza de forma excelente para bajar bastante el listón en la segunda mitad del film. ASYLUM es una antología muy interesante que contiene cortometrajes excelentes y un nivel muy bueno en general, por lo que aquellos que no hayan visto los segmentos disfrutarán con esta película. Nota personal 6/10 Asylum: Twisted Horror & Fantasy Tales
El ex soldado John Stewart se une a los Green Lanterns, una fuerza de patrulla espacial..... Green Lantern: Beware My Power critica: Entre lo positivo está la puesta en escena que recrea, prolonga y amplía la arrebatadora estética primigenia: esa llovizna casi constante, esa ausencia de horizonte, claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia.... Green Lantern: Beware My Power
Cinco villanos notorios: el Sr. Lobo, Sr. Serpiente, Sr. Piraña, Sr. Tiburón y Srta. Tarántula, que han pasado toda una vida juntos realizando grandes atracos. critica: Un lobo, una serpiente, un tiburón, una tarántula y una piraña. Cinco de los animales más temidos del mundo son los célebres criminales que, adoptando el rol que la sociedad les ha impuesto, aterrorizan la ciudad en Los tipos malos, una cinta animada para niños basada en las novelas gráficas de Aaron Blabey. Los tipos malos Pierre Perifel debuta con este largometraje cargado de acción y dosis de humor, con unos personajes carismáticos y claramente definidos con los que llega a romper la cuarta pared. Por lo que respecta a las secuencias de atracos, es evidente el guiño que hace hacia películas como Ocean’s 11 o Reservoir Dogs. Lo más destacable es, sin duda, el tipo de animación que emplea, fluida y vigorosa, atrayente tanto para un público infantil como adulto. Todo ello evoca a las recientes y notables Zootrópolis y La familia Mitchell vs. las máquinas con las que es difícil no hacer comparativas. Asimismo, las escenas de acción están realizadas al estilo similar de los tebeos y los dibujos animados, aportando mayor frescura y dinamismo, y empaquetadas con una banda sonora acorde que acentúa la energía de las imágenes. Sin embargo, el potencial de su premisa inicial se diluye en la segunda mitad del film, en parte a causa de una narrativa simple y muy masticada, cuyos hechos se desarrollan de manera demasiado predecible. Incluso el giro de guion final pierde asombro, ya que es previsible desde el comienzo. Es una lástima, en especial porque infravalora y pone en duda la capacidad de comprensión de los niños. En definitiva, Los tipos malos es una propuesta para toda la familia, entretenida y divertida de ver. Con un mensaje claro en torno a los prejuicios y las falsas apariencias, invita a la audiencia de menor edad a reflexionar sobre las segundas oportunidades, así como a dar importancia al valor de la amistad y la bondad. www.contraste.info Los tipos malos
Un hombre despierta en un hospital, incapaz de recordar quién es. Poco a poco y con la ayuda de una doctora, se va recuperando. Sin embargo, su pasado no tarda en alcanzarle, cuando un capo de la droga secuestra a la médica. El desmemoriado Ishmael deberá enfrentarse a una banda de luchadores que, quizá, fueron también sus compañeros. critica: ¿Disfrutaste en grande The Raid: Redemption de Gareth Evans? Si la respuesta es sí, Headshot no te defraudará y desde ya puedes ir a verla, tal y como yo lo hice después de leer los nombres de Iko Uwais, Kimo Stamboel y Timo Tjahjanto. El primero, de la mano de Evans actor protagónico del “renacimiento” del cine de artes marciales nacido en el Oriente Extremo (filmes de acción más encaminados a la filosofía y el drama en el Japón feudal, ejemplo de ello son títulos de Akira Kurosawa como Sugata Sanshirô de 1943), adoptado por Hong Kong y exportado (explotado) en Estados Unidos en los 70’s (Kung Fu, la serie donde salía David Carradine) y la influencia de Bruce Lee. Con el tiempo se convirtió meramente en Cine de Acción, en donde su fuerte recae en la veracidad de sus coreografías, dejando de lado la trama. Y hoy en día… ciertamente “pasado de moda”, notándose menos películas, y de haberlas, más inclinadas a las artes marciales mixtas, kickboxing, peleas callejeras… y la verdad que eso es más lo mío, disfrutando en su momento de Undisputed I, II y III, peleas colegiales en Crows Zero I y II, y cuando era niño hasta del torneo por el dragón de oro en Contacto Sangriento (1988) con Van Damme; prefiriendo poco el otro cine de artes marciales, casos aislados son 13 Asesinos (2010) o Yakuza Apocalypse (2015), ambas de Takashi Miike. Headshot ¡Pues bien! En el 2011 Evans nos traía de una manera espectacular y con una trama simplista, el nuevo cine indonesio de artes marciales en The Raid 1 y 2 (ambas geniales), repleto de brutales combates cuerpo a cuerpo, y la violencia explosiva del armamento de asalto. Genial. Con semejante calidad de violencia poco me importa la esterilidad dramática. Uno se lleva en el recuerdo a personajes como Mad Dog, Hammer girl o Baseball bat man –si no sabes de qué estoy hablando, no dudes en verla–. Pero eso es Evans. ¿Qué hay de Kimo y Timo? Bajo el nombre de The Mo Brothers y con filmes como Macabre (2009) y Killers (2014) son los directores más sólidos dentro del cine de terror indonesio. Por un lado (Macabre), un gore exquisito de la vieja escuela, y por el otro (Killers) un despiadado e inteligente filme de suspenso y asesinos seriales. De ahí lo prometedor de la combinación: Iko Uwais + Kimo Stamboel y Timo Tjahjanto. Con bastante previsibilidad y no por ello menos efectividad, Headshot narra la historia de Abdi. Un misterioso hombre que es arrastrado inconsciente por la marea hacia la costa, siendo encontrado e internado en el hospital de un pequeño pueblo. Bajo los cuidados de la joven y hermosa doctora Ailin, Abdi despierta del coma, sin embargo amnésico, debido a los restos de una bala alojados en el cerebro. Con el nuevo nombre de Ishmael, tiene la oportunidad de reiniciar su vida a lado de Ailin y los amables lugareños de la isla; por desgracia esto no durará mucho, la noticia de su aparición llega a oídos del jefe criminal Lee, quien recientemente ha tenido un sangriento escape de prisión y sabe exactamente quién es Abdi. Dispuesto a cobrar la deuda que éste le debe, Lee secuestra a Ailin para atraer al ahora Ishmael al seno de su organización y terminar con él por una vez de todas. Con reminiscencias pero sin en lo absoluto llegar a ser una The Raid 3 –no, no, ésa llegará en el 2018 a través del propio Gareth Evans–, The Mo Brothers ejecutan un filme repleto de acción con una estructura similar a los filmes de Evans: coreografías bien trabajadas, violencia explícita y visceral (quizá un poco más fuerte al involucrar aquí a niños y mujeres) y combates uno a uno in crescendo (hasta llegar con el jefe). Es la película en la que han contado con mejor presupuesto, y eso se percibe en la edición de sonido y la calidad de fotografía, ofreciendo una delicia cada que vemos como un rostro es reventado a golpes o los huesos crujen. Otro aspecto que comparte con The Raid (el cual es negativo pero no mella nuestra apreciación) es la actuación: no es su fuerte. Los villanos cumples su función satisfactoriamente. Los protagonistas son los que fallan: “Iko Uwais” será muy bueno para pelear no así para interpretar sentimientos o recitar diálogos, y la bella Chelsea Islan… ¿sobreactuada? No sé... bueno, nimiedades. Basta de similitudes, debo mencionar algo en lo que The Raid y Headshot difieren: su trasfondo melodramáticamente artificial. No me gustó y es lo que sí termina mermando ligeramente mi nota. No pido un argumento inteligente en películas con estas características, pero sí, que no me disfracen el producto de sensiblería sosa. Finalmente, ¿es una película recomendable? Por supuesto. Hartamente entretenida si te gusta el cine asiático extremo, The Raid, y/o el cine de acción y de artes marciales. ¿Es mejor que The Raid? No. ¿Es la mejor película de The Mo Brothers? No. Carece de la “originalidad” e inteligencia de The Killers, también de la pasión desordenada y aún inexperta de Macabre. Eso sí, es un filme más maduro. http://teatro-vandrian.blogspot.mx Headshot