Cinco amigos de la infancia se reúnen después de 20 años porque uno de ellos está empeñado en volver a probar suerte en un maratón alcohólico que nunca pudieron llegar a completar. Gary King, un cuarentón que todavía no ha conseguido superar la adolescencia, convence a sus cuatro reacios amigos y los arrastra a su pueblo natal en un desesperado intento por llegar al famoso pub “The World’s End”. Pero mientras intentan reconciliar el presente con el pasado, empiezan a darse cuenta de que la auténtica lucha debe librarse por el futuro, y no solo el suyo, sino el de toda la humanidad. Llegar al pub “The World’s End” es ahora el último de sus problemas. c critica: La nueva película de Edgar Wright y que pone punto y aparte a su trilogía idiota es una de las mejores (si no la mejor) comedias del año. (Punto y aparte porque su siguiente película será Ant-Man para la fase 3 de Marvel). Bienvenidos al fin del mundo Para empezar consigue crear un grupo de colegas de mediana edad bastante majo y con el que el espectador puede empatizar al instante. Un grupo capitaneado por su compañero de correrías, Simon Pegg que, aunque parezca estar encasillándose en estos papeles, realiza una actuación notable y realmente peculiar que dota de cierto carisma a su personaje. Un personaje, el de King Gary exteriormente psicótico, pero interiormente lleno de cicatrices (algunas literales), y que está secundado por Martin Freeman, Rosamund Pike y Nick Frost entre otros (con algún que otro cameo sorpresa). Segundo, crea un objetivo interesante: realizar un recorrido a base de cerveza por 12 bares de su pueblo natal, finalizando en el famoso bar "El Fin del Mundo". Y todo ello mientras se van desarrollando, más o menos, las diversas personalidades de los integrantes del grupo (el divorciado, el que no maduró, el que sufrió abusos, el que escondió sus sentimientos) a través de un guión que consigue arrancar más de una carcajada, y que está mucho más pulido que en sus obras anteriores. En el fondo, con todas las cargas que llevan encima los protagonistas concernientes a su época de adolescencia, dotan a la película de una profundidad (ligera eso sí) y una seriedad bastante extrañas en una producción de este tipo. Tercero: le mete una trama postapocalíptica-robótica-raruna que al principio descoloca un poco y que finalmente se revela como una copia más o menos similar a "Zombie's Party", lo cual le quita puntos a la película, porque nos lleva de vuelta a lugares comunes (ese bar asediado por zombies o en este caso, robots raros). La consecuencia de esto es que se le puede achacar cierta falta de originalidad en cuánto a planteamiento formal, y que su epílogo final quede un poco fuera de tono (aclaro en spoiler con spoilers), pero eso no impide que se pueda disfrutar de la película y echarse unas buenas risas con ella... bueno... y beberse alguna cerveza de paso. Seguramente me vayan a caer muchos negativos por esta crítica, dado que el público en general están decepcionados con la cinta, pero solo he intentado dar una opinión personal respetando todas las demás, así que muchas gracias por leerme y valorarme positivamente si alguien lo hace! Bienvenidos al fin del mundo
Un romántico empedernido piensa que ha encontrado el amor verdadero, solo para descubrir que lo ella lo está utilizando para vengarse de su marido. critica: Esta película es una comedia tontorrona que parte de un inicio poco creíble: una madurita cañón que se tira a un joven friki que ni siquiera le gusta (como si Christina Applegate no tuviera dónde elegir), y el marido se va a vivir con él. Y no sólo eso, si no que se convierte en su chacha. Mientras que el marido es un tipo seguro de sí mismo, y trata a las mujeres como simples vaginas, el friki es un tipo sensible en busca del amor de su vida. La venganza se sirve fría No hay momentos hilarantes. Como mucho, momentos simpáticos, por mucho que se esfuercen en las extravagancias de esta extraña pareja. Algunos de ellos son un clásico del cine adolescente, como la típica fiesta universitaria con todo el mundo desmadrado, aunque reconozco que ahí está el único momento que ha hecho realmente que me tronche. La venganza se sirve fría
La película está ambientada en la prehistoria, donde Crug lidera a su familia más allá de la comodidad de su hogar después de que este sea destruido por un gran terremoto. Mientras intentan viajar por el desconocido y aterrador mundo, se encuentran con un nómada que cautiva a su clan, en especial a su hermana mayor, con su mente moderna. critica: Dreamworks ha sido la primera en abrir la veda. Los Croods Y es que, con el estreno de 'Los Croods', empezará la emocionante “batalla” entre las películas de animación para ir ganando puntos de cara a los siguientes Oscars. Y es que lo que se avecina es para que se le caiga la baba a los amantes de la animación: a la esperadísima secuela de 'Monstruos S.A.', también las de 'Lluvia de albóndigas' (la cual fue una maravillosa sorpresa), 'Gru' o 'Los Pitufos'. A estas hay que sumar 'Frozen', la gran apuesta de Disney de este año (si catalogamos a 'Monstruos University' como de Pixar), 'Turbo' (la otra apuesta de Dreamworks) y 'Futbolín' (la incursión de Juan José Campanela en el mundo de la animación y la primera película argentina en animación 3D). Pues ante todo este catálogo prometedor, 'Los Croods' no tiene por qué achantarse, en absoluto. Yo la catalogaría como lo mejor de la compañía desde 'Cómo entrenar a tu dragón'. Dreamworks empieza a ver la luz que hay que seguir, al igual que los protagonistas de su película. Si bien aún le falta arriesgar a lo grande para estar a la altura de Disney/Pixar, la animación que presenta 'Los Croods' es de una belleza impresionante. Eep es la hija mayor de la familia Crood, y sueña con dejar su vida de cavernícola recluido en cuevas y temeroso de todo para investigar qué hay en el mundo y vivir la vida, más allá de la superviviencia. Cuando un día se encuentra con un 'chico' (de hecho se llama a sí mismo 'Guy') que usa sus ideas para subsistir, y no solo su fuerza. Esto creará un conflicto con Grug el padre de Eep y cabeza de familia de los Croods. Si bien por la misma sinopsis sabemos qué derroteros seguirá la historia, la película no se resiente por ello, pues aparte de su apabullante estilo visual, es lo suficientemente entretenida para obviar las carencias que se puedan sacar de un análisis a su guión. No es su pretensión dar clases de historia a los niños y mayores que se acerquen a las salas de cine a verla, sino hacerles pasar un buen rato, y eso se consigue con creces. La fauna y flora que inunda la película es imaginativa y rica en matices, con simpatía y cariño por parte de sus autores. Seguramente debamos dar las gracias a Chris Saunders de que esté detrás de todo esto. Kirk de Micco seguramente habrá aprendido mucho del director que nos había ya brindado dos joyas como son 'Lilo & Stich' o 'Cómo entrenar a tu dragón'. Ésta es su tercera película y desde luego puede estar orgulloso de su brillante carrera hasta ahora. Otro de los puntos fuertes de 'Los Croods' viene de alguien que ya ha trabajado con Saunders (en 'Lilo & Stich'), Alan Silvestri (nominado dos veces a los Oscars por sus bandas sonora de 'Forrest Gump' y 'Polar Express') quien brinda una excelente banda sonora, a la altura de su factura técnica. Teniendo estos apartados cubiertos con notoriedad, queda el apartado de los personajes principales y secundarios, que si bien son arquetipos de moldes prefijados (como suele pasar) al menos cumplen su papel con carisma y simpatía, incluso hasta el animal/personaje graciosete de turno, aquí el llamado Cintu (Belt en el original), ya que Guy lo usa de cinturón, entre otros miles de usos. Pues hasta ese personaje tiene su gracia. Las voces corren a cargo de Nicolas Cage (Grug), Emma Stone (Eep), Ryan Reynolds (Guy), Catherine Keener (Ugga) incluso el mismo Chris Saunders (Belt). Así pues, 'Los Croods' se erige como una apuesta más que interesante para que las familias pasen un rato agradable en el cine, para que los amantes de la animación empiecen a frotarse las manos, para que Dreamworks se quite la etiqueta de 'secundón' en lo que a animación se refiere, y que, si bien 'Monstruos University' tiene medio ganado ya el Oscar, por qué no, fácilmente podrían ser estos Croods una de la que la acompañe en las nominaciones. Con los futuros proyectos de 'Cómo entrenar a tu dragón 2', 'Kung Fu Panda 3', 'Los pingüinos de Madagascar' o la adaptación al largometraje de 'Alma', el corto de Rodrigo Blaas que se llevó el Goya en 2009, Dreamworks seguirá dando que hablar. Los Croods
Cuando cuatro tipos fuera del sistema descubren que los grandes bancos, los medios de comunicación y el gobierno se niegan a reconocer el colapso de la economía, tienen una idea: 'La Gran Apuesta'… pero sus inversiones de riesgo les conducen al lado oscuro de la banca moderna, donde deben poner en duda todo y a todos... critica: La película se resume en estas pocas palabras que Ryan Gosling, uno de los actores que la protagoniza, ha declarado a raíz del éxito del filme y que valen más que mil otras que yo pueda colocar aquí. Dice así Ryan Gosling refiriéndose a la enjundia esencial o meollo del filme: «Mucha gente escucha la jerga financiera y desconecta racionalmente ante la terminología dizque ”económica“, una terminología creada con la idea de hacer sentir estúpido a quien la escucha y no preguntar nada para que ellos hagan lo que les dé la gana con nuestro dinero.» La gran apuesta Esa jerga económica y financiera es la que emplean los banqueros y bancarios, los profesores de la pseudo ciencia llamada economía, los altos funcionarios estatales de Hacienda o del Estado, los periodistas conchabados con todos ellos, etc., y siempre es igual, la emplean para engañar, para tergiversar, para estafar, para dar gato por liebre, para vivir como casta derrochadora a costa de lo que sustraen a las clases medias y gente que le da su confianza. Ya lo dice el refrán: «No es el asesor financiero el que expone el dinero». El dinero quien lo expone es usted y todo quien confía en ellos para que maniobren con sus ahorros. Pero descuiden, que los policías al servicio de los órdenes estatales y de los mandamases no perseguirán al presidente del Banco de España que diera su visto bueno para que a usted le robaran con la citada jerga, ni perseguirán a los directores de bancos como ocurre actualmente en España, por cobrarle en lugar de pagarle intereses una vez usted les confía sus ahorros o, lo que es más canallesco aún, por domiciliar o tener su sueldo a través del banco, cosa que encima no nos dejan recibir de otro modo que no sea irremediablemente a través de una entidad financiera; no, ellos no persiguen a los grandes ladronazos, ellos prefieren perseguir, como actualmente están haciendo los funcionarios de Hacienda en España, a una simple maestra jubilada por haber dado y cobrado unas clases magistrales una vez pensionada, unas clases extras por las que ganó poco más de mil euros, y por las que la han multado abusadoramente con más de treinta mil euros. Contra los débiles de la clase media es contra los únicos que se atreven (salvo poquísimas y ocasionales excepciones bien dispuestas para hipnotizarnos) ésos que ocupan jefaturas y dicen ser servidores nuestros y de la justicia social. Para frenar y asfixiar a los pobres mileuristas son la más de valientes los responsables del «Orden y la Civilización», pero verán ustedes como a la presidenta del Banco Santander, entre otros, no la frenan en su insaciable codicia; todo lo contrario, ha sido nombrada asesora por políticos o gobernantes de la «Gran Bretaña y la madre que la parió» precisamente por eso. En consecuencia: ojo con ellos y sus ladronazas tarjetas bancarias, atentos al simple ritmo de 1,2,3, pues le atracan o le quitan su dinero a la vez que le envuelven con una jerga según la cual usted va ha salir ganando. Fej Delvahe La gran apuesta
El origen de las carreras de dragones. , es un cortometraje que describe cómo se inventaron las carreras de dragones. Hipo y todos sus amigos de la academia del dragón discuten sobre quien lo inventó realmente. critica: Por una parte, soy un tardío fan de la cinta original. En 1983 me pareció un pestiño (era un adolescente abducido por ‘La guerra de las galaxias’); en 1992, en mi opinión, el montaje del director mejoraba (y mucho) la propuesta; pero no fue hasta hace algunos pocos años, ya en formato blue-ray, en que me sedujo y cautivó por completo y sin reservas. Por otra parte, soy un entusiasta admirador del director Denis Villeneuve, de quien sólo he visto aciertos de todo género y planteamiento, un virguero de las imágenes y del montaje, un artista incontestable y evidente, lo mejor que me he encontrado en una sala de cine en lo que va de siglo. Es decir, que iba con ganas y sana curiosidad al cine, esperando encontrar un propuesta inédita y – sea cual fuera el camino elegido – llena de aciertos… pero nada más lejos de la realidad.Pero vayamos por partes, porque hay muchos aciertos pero también otros tantos deméritos dignos de mención. Entre lo positivo está la puesta en escena que recrea, prolonga y amplía la arrebatadora estética primigenia: esa llovizna casi constante, esa ausencia de horizonte, claridad y sol, ese opresivo presente de pesadilla que parece abocarnos al abismo, esa mezcolanza entre replicantes y humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Dragones Cómo entrenar a tu dragón: El origen de las carreras de dragones Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia. Dragones Cómo entrenar a tu dragón: El origen de las carreras de dragones
Bienvenido al negocio de chuletas para exámenes dirigido por Lynn, una estudiante brillante que encuentra la idea de negocio después de ayudar a Grace y Pat. Grace es una destacada activista escolar que no puede obtener las calificaciones que necesita. Pat es un chico rico y sucio que cree que el dinero puede comprar cualquier cosa. El negocio de Lynn se dispara y se inunda de dinero cuando decenas de estudiantes ofrecen su dinero a cambio de respuestas al examen. critica: Al cine tailandés no debe resultarle sencillo, como a muchas de las cinematografías de sus países vecinos, alejar esa imagen turística de bellos paisajes, que muchos pueden tener en mente, justo antes de acercarse a una producción de bandera tan lejana y desconocida. Bad Genius Seguramente por eso, el realizador Nattawut Poonpiriya, – evidentemente he tenido que buscar y copiar su nombre -ha intentado huir de cualquier guía de viajes, que pudiera alterar el potencial de esta, su segunda película tras la cámara, un trabajo sobre un grupo de alumnos que plantea una serie de estafas en el ámbito escolar, que pese a todo lo dicho, consigue atesorar, aún de forma involuntaria, y aunque solo sea por la diferencia de contraste entre nuestras culturas, ese aspecto exótico que suele acompañar a toda producción asiática que se precie. La buena noticia es, por tanto, que ‘Bad Genius’ poco o nada tiene que ver con la estúpidas comedias adolescentes, casi todas con denominación de origen USA, que se suelen estrenar, básicamente, porque su realizador parece tener una respuesta continua a lo que cada momento necesita, modulando las dosis de ritmo y tensión para que su propuesta, de algo más de 120 minutos de duración, no resulte nunca aburrida o falta de interés. Mención aparte merecen unos actores, todos con un nombre aún más impronunciable que el de su director, que suman su talento interpretativo a unos personajes sólidos, que incluso se permiten evolucionar de forma creíble, a medida que la historia desmadeja sus hilos en favor o en contra de sus intereses personales. En los apartados técnicos, destaca un excelente trabajo de fotografía, que pese a estar limitado a espacios habitualmente cerrados, contribuye de manera indiscutible a potenciar, gracias a un tono luminoso y cristalino, el carácter dinámico del que el film hace gala. Finalmente, ‘Bad Genius’ es de esos trabajos llamados a suplir la monotonía que provoca, en su mayoría, el encorsetado y comercial cine occidental, se muestra original y libre para expresar su concepto entusiasta, consigue además transmitirlo en gran medida, sin grandes aspavientos, y con elementos universales de comunicación como la música o el cálculo matemático aplicado. Con todo, el único reproche que se le puede hacer a este film Thai, es que no sabe ofrecer una conclusión a la altura de lo esperado, factor que en cualquier caso, no consigue empañar sus méritos académicos, merecedores de una calificación cercana a lo notable. Bad Genius