Brian Nichols es conocido por su fuga y matanza en el condado de Fulton, Georgia, el 11 de marzo de 2005. Nichols estaba siendo juzgado por violación cuando escapó de la custodia y asesinó al juez que presidía el juicio, un reportero de la corte, un ayudante del sheriff y más tarde un agente federal. Una cacería humana a gran escala se inició en el área metropolitana de Atlanta y Nichols fue detenido 26 horas después. La fiscalía lo acusó de haber cometido 54 crímenes durante la huida y fue declarado culpable de todos los cargos el 7 de noviembre de 2008. critica: Hombre, no voy a decir que sea la peor película de secuestro en casa que haya visto nunca, porque no lo es. Ahí están “Allanamiento de morada”, con Natasha Henstridge y la vomitiva “Funny games” con Naomi Watts, por ejemplo. Pero, desde luego, esta cosa tiene poco de buena y es un “anti-thriller”. Entiendo que se basa en un hecho real, pero si querían haber hecho algo un poco más interesante, tendrían que haberse centrado en la palabra “basada” y no calcar unos acontecimientos que no dan para más de un artículo breve en un periódico. No solamente lo que cuenta no tiene enjundia, sino que lo hace mal. El reparto tiene una credibilidad nula. La fotografía es horrorosa, con una cámara que a veces se mueve mucho sin venir a cuento y otras se acerca demasiado a los actores. El ritmo y desarrollo argumental es horrible, invitando a mirar cuánto le falta cada dos por tres, e incluso haciendo pensar en dejar de verla a medias. Uno espera encontrar un mínimo de emoción o de escenas de tensión en un film de secuestros, pero no es así. Siento lo que le pasó a la mujer real, pero no siento la menor empatía por esta mala madre drogadicta que no es capaz de superar su adicción ni siquiera por su hija. Y no sé si es por culpa de Kate Mara, que es una actriz del montón pero no tengo nada contra ella. En la otra parte, tenemos a un malo que al principio lo ponen muy malvado, y luego de buenas a primeras intentan vendernos la moto de que no es tan malo. ¿En qué quedamos? Además, este tipo no es capaz de dar el más mínimo miedo. A la primera de cambio se pone a charlar tranquilamente con su cautiva, y a desayunar tortitas mientras la otra ¡está leyendo! Por no hablar del momento en el que el secuestrador se droga. Es muy inverosímil, aunque seguramente pasó de verdad. Tiene a una rehén (por cierto, no se sabe muy bien para qué) y baja la guardia metiéndose una raya y colocándose. La cosa tiene miga. ¿Pero qué clase de secuestro es éste? Ni siquiera en la entrada a la casa se han esmerado en ponernos demasiado nerviosos. Por no tener no tiene ni banda sonora en las secuencias que se suponen más importantes. Y es que la película tiene una factura de telefilm de bajo presupuesto (con entrevistas a la protagonista real incluidas) que hace que todo esté bastante mal. Tiene la dudosa capacidad de conseguir que no pase casi nada en sus 97 minutos (contando los créditos), y hacer que una supuesta situación estresante se vuelva completamente aburrida. Supongo que han querido respetar lo sucedido, pero siendo así, realmente no tenían que haberla hecho si la cosa no daba para tanto. Cautivo
William Tell (Oscar Isaac) es un exmilitar y jugador profesional de póker. Su meticulosa vida se trastoca cuando se le acerca Cirk, un joven que busca ayuda en Tell para ejecutar su plan de venganza contra un coronel militar. critica: Me fui al cine; de sesión de noche. Yo solo. Me gustan las películas que sorprenden. Más allá del tratamiento argumental, el ritmo, la fotografía, el desarrollo de los personajes... lo que más valoro es la originalidad en la historia: "Mejor guion en la Seminci... Nominada a mejor guion en la Asociación de críticos de Chicago... hmm! venga, me animo". Todos dormidos en casa, y yo al cine. El Contador de Cartas La película se desarrolla en un ambiente excelente, con gusto. La música acompaña, es perfecta. Oscar Isaac, protagonista y desconocido para mí, muy bien en su papel de experto jugador de póker. Es el típico personaje de alto coeficiente intelectual, muy seguro de sí mismo y, de hecho, nunca falla. Cuando se anima a llevarse al muchacho de acompañante, pues me parece interesante... "Qué está tramando este tío? Seguro que está preparando un plan interesante". La tensión y las "ideas" van evolucionando. Todo aparentemente bien urdido (¿sugestión?) a la espera de "la gran sorpresa" de ese genial guion alabado por la crítica. -ver spoiler si te apetece- La película bien merece un visionado. Muy buen gusto, ritmo, ambientación, buena actuación, una temática interesante aunque quizás algo manida... Todo pinta bien (menos el doblaje de la chica, lamentable) pero al final, ese desenlace... todo estaba tan bien tejido, tan gustosamente cocinado que la resolución final, sin dejar de ser una sorpresa, me deja bastante indiferente. Quizás hayan sido las expectativas. He buscado explicaciones que hagan que haya algo más allá. Ya me ha pasado otras veces. Buscas info o simplemente dejar el poso en la cabeza que se vaya desarrollando para dejar crecer una reflexión que se me escape y que haga que todo se ensalce y me sorprenda a posteriori del visionado, pero no. No encuentro algo que me llene, que justifique esta película como imprescindible. El Contador de Cartas
Harriett fue en su día una exitosa empresaria. Siempre ha controlado su vida. Por eso decide que su obituario también quiere controlarlo. Para ello contrata a una escritora para que narre la historia de su vida. Pero el resultado no será el esperado... critica: Encontré esta película haciendo zapping en la tele una tarde aburrida mientras me tomaba un te y la deje por descarte, porque no encontraba nada que me atrajera totalmente. Por suerte no fue una mala decisión, y me tope con un film que, sin ser nada del otro mundo, me entretuvo por dos horas con una historia bastante mas interesante y divertida de lo que en un primer momento podría parecer. Harriet Lauler (MacLaine) es una empresaria retirada que siempre ha buscado tener el control de todas las cosas de su vida y alrededor, por lo que decide contratar a una joven escritora (Seyfried) para que se encargue de escribir su obituario el día que ella muera. El problema para Harriet es que ni familiares, ni ex compañeros de trabajo, ni vecinos tienen algo bueno que decir de ella, sino todo lo contrario. Por lo que decide intentar darle un cambio radical a su vida, obviamente con su particular manera. La química que logra la dupla MacLaine-Seyfried es palpable y disfrutable desde el comienzo, ambas están geniales en todo momento. MacLaine es una gigante del cine y una garantía de buena interpretacion, y Seyfried es, en mi opinión, una actriz bastante infravalorada que siempre cumple en sus papeles y logra darle a sus personajes el tono adorable que necesitan para historias como esta. Recomendable. Mi última palabra
Un implacable agente del MI6 británico (Mark Strong), del grupo de operaciones especiales, descubre que tiene un hermano (Sacha Baron Cohen) muy diferente a él: fanático del fútbol y protagonista de numerosos y disparatados altercados dado su peculiar y conflictivo carácter. critica: «Pobre Mark Strong». Será seguramente el primer pensamiento que os vendrá a la cabeza después de ver la nueva salvajada que Sacha Baron Cohen nos tiene preparada. Agente contrainteligente Agente Contrainteligente —como siempre, una traducción particularmente gilipollas para el título original, The Brothers Grimsby— es la típica parodia del cine de espionaje y agentes secretos que hemos visto ya mil veces. La propuesta no difiere demasiado de otras cintas como Johnny English o la más reciente (y recomendable) Espías. Si acaso, aquí hay un poquito menos de James Bond y algo más de Jason Bourne, pero ni eso es suficiente para quitarnos la sensación de déjà vu. No obstante, sí que cuenta con un as en la manga. Un pequeño elemento diferenciador que consigue que (algunos) pasemos por alto el agotamiento de la fórmula. Estoy hablando, cómo no, del sentido del humor de Sacha Baron Cohen. Su estilo impregna todo el relato y creedme si os digo que no pasa desapercibido en ningún momento. Para bien o para mal. Como ya os estaréis imaginando, no se trata precisamente de un refinado, sutil e inteligente humor inglés. Quienes hayan visto otras películas de su cosecha ya sabrán que Agente Contrainteligente es una batería de salvajadas gratuitas y chistes escatológicos. Pero dejad que os hable del humor escatológico en esta película. A Sacha Baron Cohen se le podrán reprochar muchísimas cosas, pero si hay algo que se le dé especialmente bien es desarrollar su enorme capacidad de proponer una situación sucia y empeorarla hasta límites insospechados. De verdad. Nadie es capaz de llegar tan lejos como él. Escenas como las del veneno o el improvisado escondite ya pueden parecer jodidas sobre el papel, pero Cohen sabe darles una vuelta de tuerca en el momento más oportuno para convertirlas en algo todavía más desagradable. Cualquier otro guionista habría terminado la escena cinco minutos antes. No nuestro Sacha. Hay que reconocerle el mérito de no echarse atrás en ningún momento, de darlo absolutamente todo. Al ser esto una comedia de acción, resulta de agradecer que se hayan tomado bastante en serio ese aspecto contratando a Louis Letierrer como director. Siendo un tipo bastante curtido en el cine más palomitero como Transporter 2 o El Increíble Hulk, nos regala un par de escenas considerablemente imaginativas y espectaculares que no desentonarían en absoluto en cualquiera de las películas que está parodiando. Hablar del reparto y de las actuaciones en una película como ésta es una tontería como un templo, pero lo voy a intentar: Mark Strong hace del tipo duro que hemos visto en casi todas las cintas de su carrera y Sacha Baron Cohen nos ofrece aquí al que no es su personaje más flojo porque el dictador Haffaz Aladeen fue peor. Eso sí, aunque no peguen ni con cola, se las apañan para construir una extraña química en pantalla que termina funcionando. El resto de caras conocidas que se dejan ver durante el metraje como Penélope Cruz, Isla Fisher, Rebel Wilson o Ian McShane sólo están ahí para hacer bulto y porque si no, no habría película. Pero nada más. Ni siquiera tienen una cuota de pantalla destacable. Algunos sirven para provocar ciertos chistes, otros sólo para que exista una trama sobre la que construirlos. Con todo lo que he dicho hasta ahora puede parecer que Agente Contrainteligente no me ha gustado, que me ha parecido una mierda y que sólo tengo malas palabras para ella. Pero nada más lejos de la realidad. Con pocas películas he tenido el placer de reírme tanto en una sala de cine. Y no estoy hablando de una sonrisa tímida, sino de estallar violentamente en carcajadas. Por lo menos en un par de ocasiones. De mil chistes que hay en cada escena, sólo funciona uno. Pero ese que funciona, funciona fuerte. Así que ya sabes, si tienes quince años, odias a Donald Trump y te encantan los chistes sobre cáncer, sida, semen, incesto, sodomía y zoofilia entre otras muchas lindezas, ésta es tu película. No es que tenga ningún tipo de valor cinematográfico, ni muchísimo menos, pero difícilmente encontrarás algo que se acerque a rozar siquiera su nivel de suciedad. Nadie gana a Sacha Baron Cohen en su propio campo. Gente con buen gusto, abstenerse. Crítica original en: http://www.criticronico.com/2016/03/agente-contrainteligente.html Agente contrainteligente
Nuestra familia de monstruos favorita se embarca en un crucero de lujo para que por fin Drac pueda tomarse un descanso de proveer de vacaciones al resto en el hotel. Es una navegación tranquila para la pandilla de Drac, ya que los monstruos se entregan a toda la diversión a bordo que ofrece el crucero, desde el voleibol de monstruos y las excursiones exóticas, a ponerse al día con sus bronceados de luna. Pero las vacaciones de ensueño se convierten en una pesadilla cuando Mavis se da cuenta de que Drac se ha enamorado de la misteriosa capitana de la nave, Ericka, quien esconde un peligroso secreto que podría destruir a todos los monstruos. critica: La cuarta (y dicen que última) parte de la saga va en la línea de las anteriores en lo que se refiere a humor, animación y diversión para toda la familia. Aunque la pandemia haya provocado su estreno directo en “streaming”, personalmente no le noto mucha menos calidad que las otras. Es más, me parece mejor y me he reído más con esta que con la tercera. Una vez más, los líos de Drácula, su familia y el hotel son solo una excusa para una montaña rusa de chistes graciosos que casi no dan respiro, usando un humor muy visual para que niños y no tan niños puedan pasar un rato genial riéndose con sus ocurrencias, como por ejemplo cada vez que sale la gelatina. Puede que algunos la vean un poco infantil, pero yo me lo paso muy bien y me río viéndola, y con eso es suficiente para que me parezca buena. Hotel Transilvania 3: Unas vacaciones monstruosas
Ben es un padre que ha pasado diez años viviendo en los remotos bosques situados al noroeste del Pacífico criando a sus seis hijos. Sin embargo un día la familia debe abandonar su modo de vida en la naturaleza y volver a la civilización. Asimilar su nueva situación y adaptarse de nuevo a la sociedad moderna no les va a resultar nada sencillo. critica: He salido de ver esta cinta con sensaciones encontradas. Muy probablemente porque llegué con expectativas demasiado altas. Captain Fantastic Los agujeros en el guión me parecen excesivos: por ejemplo, el poco "flipe" de niños que jamás han estado en la civilización con la primera visión de esta; la enorme e irreal capacidad de unos niños que son superatletas, saben varios idiomas, física avanzada, y son perfectamente capaces de cazar sus propias presas; o la increíble incorruptibilidad del cuerpo de la madre que está perfectamente hermoso y no se ha podrido después de 6 o 7 días desde su muerte. Por otro lado, la comicidad me parece escasa (daba para muchísimo más) y la profundidad filosófica un poco superficial al tocar varios temas en los que tampoco profundiza. Aunque el planteamiento puede parecer socialmente subversivo, al final no lo es, o al menos el autor no se sitúa claramente a favor de la subversión. En cambio me gusta que una cinta comercial se atreva a tocar cosas generalmente tabú como el hablar de muerte a los niños, la ridiculización de los centros comerciales, lo absurdo de las religiones organizadas, e incluso mostrar con cierto "desprecio" a los primos civilizados. Me falta un poco de todo, me falta más drama, más humor, y más profundidad en general para que la cinta sea lo que yo esperaba ver. Aún así, bastante por encima de la media general y una película en la que sales pensando. A destacar la fotografía, con varios momentos de sol frontal y bajo contraste, y la música. Ambas con un toque muy indie. Todos los actores me parecen fantásticos en sus papeles. Echo de menos más metraje para cada niño por separado. Pero también es cierto que echo de menos tantas cosas, que si hiciesen la película para mi duraría tres horas. Captain Fantastic